jueves, 22 de agosto de 2013

Primer día en Reunión

Estos días no he tenido tiempo para hacer nada, así que voy a contar un poco mis primeros días en Reunión.
Mi llegada no fue una llegada triunfal, porque nada más llegar al aeropuerto me dijeron que mi maleta se había perdido. La mujer no me entendía y yo a ella poco, al final me dio su número y me dijo que me llamarían cuando supiesen algo. Solo con el macuto era más fácil moverme, así que fui a preguntar si había autobuses para ir a la universidad. Aquí el transporte público debe ser una mierda, porque a las 8 de la mañana no había ningún autobús, y tenía que esperar más de unas dos horas para cogerlo, así que cogí un taxi. 
Llegué a mi residencia y allí no había nadie, así que entré a la cocina y una chica me explicó que tenía que ir al CROUS para que me dieran mi habitación.
En el CROUS había otro chico Erasmus alemán que llevaba una semana en Reunión, y me estuvo contando un poco de todo. Luego conocí a otras 6 erasmus, todas alemanas y estudiantes de biología, que habían llegado esa mañana también. Estuvimos esperando más de 1 hora para conseguir que nos dieran la llave de la habitación, sin haber dormido nada en el avión y yo con dolor de garganta y fiebre.
Por fin nos dieron la llave, y nuestro coordinador nos dio media hora para descansar, que a mí se me pasó volando, y nos llevó a dos alemanas y a mí a ver la universidad. Después fuimos a relaciones internacionales, pero yo no pude inscribirme porque no llevaba ninguna foto, así que estuve una hora allí para nada. 
Todo el mundo era alemán, y la gente no me entendía prácticamente nada, y yo tampoco me enteraba de nada de lo que me decían.
Volví al CROUS a ver si sabían algo de mi maleta, y dos profesores me dijeron que fuera con ellos en su coche a buscar la maleta al aeropuerto, pero resulta que la habían mandado al oeste de la isla y no llegaría hasta unas horas después.
Cuando por fin llegó la maleta, tuve que ir a recogerla a RRII, y un profesor me dijo que me llevaba la maleta en el coche a mi residencia. 
Estuve esperándole pero no bajaba, y justo pasaron todos los erasmus y se acercó el chico alemán que había conocido por la mañana a preguntarme por qué estaba allí con la maleta. Me dijo que mi residencia estaba cerca y que él me llevaba la maleta si yo quería, así que nos fuimos a la residencia andando. Me dijo que por la tarde quedarían algunos erasmus y que fuera, pero yo no tenía móvil ni nada para comunicarme.
Esa tarde me quedé dormida porque estaba cansadísima, y se me pasó la hora, así que cuando me levanté bajé a recepción. En recepción estaba el guardia tocando la guitarra española con un chico reunionés, así que me quedé con ellos un rato hablando y el guardia me estuvo contando su vida aunque no me enteré de casi nada porque además de hablarme en francés, hablaba criollo, así que como si fuera chino.
Después le pedí al reunionés que me llevase donde se reunían los erasmus, así que nos fuimos a otra residencia del campus. 
Estaban haciéndose la cena y bebiendo cerveza, y ahí me acordé de que todavía no había comido nada en todo el día, excepto el desayuno del avión. Un chico que hablaba un poco de italiano me dijo que si quería yogures que él tenía, pero yo quería cenar así que le dije al reunionés que si me acompañaba a cenar. 
Al final acabé cenando pizza, y hablando medio inglés medio francés con Pierre para poder entendernos. Me dijo que me invitaba a cenar pero al final quedamos en que a cambio yo le invitaría otro día. 



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